Si quieres conocer todos los tipos de lentes de contacto que existen, este artículo de nuestra óptica online va a resultarte muy interesante. En él te hablaremos de los diferentes tipos de lentillas que existen, de modo que puedas escoger la que más se adapte a tus necesidades o gustos. Esperamos que este artículo te resulte útil y puedas decidir qué lentillas llevar en tu día a día.
¿Qué tipos de lentes de contacto existen?
Las lentillas pueden clasificarse en función de varias características. Aquí vamos a hablar sobre los tipos que existen en función del material, de la duración, de la forma que tienen y del tiempo de uso máximo que se permite en cada una de ellas.
Lentillas en función del material
Esta es probablemente la clasificación más frecuente. Unas de las más utilizadas hoy en día son las blandas. Este tipo de lentes se elabora con un gel con alto contenido hídrico, lo que explica su maleabilidad y su adaptación tan fácil al ojo.
Antes de estas lentillas blandas, las de mayor uso (que hoy en día han caído en decadencia) eran las duras o de PMMA (metacrilato de polimetilo). A nivel óptico estas eran unas lentes de contacto muy interesantes que ofrecían una visión nítida. Sin embargo, no permitían la transferencia de gases y, por eso, cayeron en desuso.
Sin embargo, las lentillas más utilizadas hoy en día son las de hidrogel de silicona, que eligen más del 50 % de las personas que usan lentes de contacto. La diferencia con las otras lentillas blandas es que permiten mayor traspaso gaseoso, lo que hace que la córnea reciba mayor parte de oxígeno; de ahí viene su éxito.
Por último, está un compromiso entre los dos casos de nitidez (utilizando materiales similares al PMMA) y permeabilidad a gases. Es el ejemplo de las lentes permeables a gases, conocidas como GP o RGP. Las usan aproximadamente un 10 % de los pacientes y se recomienda sobre todo en personas que tienen astigmatismo.
Lentillas en función de la duración
Actualmente, el mercado de las lentes ha crecido mucho, y existen numerosas posibilidades de duración de cada par. Así, existen personas que utilizan lentillas de usar y tirar diariamente, que se descartan cada día. Esto suele ser útil si utilizas mayoritariamente gafas o tienes poca graduación.
Sin embargo, si buscas un uso más frecuente puedes encontrar lentillas de quince días, de cada mes o cada trimestre. Las de mayor duración pueden durar un semestre o hasta un año completo.
Lentes por tiempo de uso
Otra de las clasificaciones atiende al tiempo máximo de uso de cada lente. Así, las más conocidas son las variantes que pueden utilizarse durante unas 8 horas, pero han de retirarse por la noche. No obstante, también existe otra variante que permite utilizarlas también durante la noche y hasta una semana sin necesidad de retirarlas.
Lentes de contacto clasificadas por la forma
La última forma de clasificarlas atiende al diseño. Así, lo más típico es utilizar lentes esféricas, pero también es bastante frecuente optar por las tóricas (si además de corregir hipermetropía y miopía se quiere compensar el astigmatismo). No obstante, si también quieres mejorar otros aspectos como la presbicia puedes recurrir a las lentes multifocales.
A modo de curiosidad, es posible que también hayas escuchado en alguna ocasión hablar de lentes de contacto que permiten cambiar el color de los ojos. También existen las que tienen dibujos, opciones que en ambos casos se utilizan para disfraces. Además de estas particularidades, es posible diseñar personalizadamente las lentillas, intentando adaptar al ojo y mejorar otros aspectos de la visión. Este tipo de lentillas pueden encontrarse en una tienda de gafas de sol online.
¿Cómo deberías escoger tus lentes de contacto?
Ahora bien, si te ha llegado el momento de escoger tus lentillas, es interesante que te hagas algún análisis de la córnea donde van a colocarse. Algunas personas tienen algunas rugosidades en esa zona que hacen que las lentes más normales sean rechazadas, resulten bastante molestas o provoquen sequedad ocular.
Para ello, lo mejor es probar con diferentes marcas y modelos hasta dar con el clavo. En el caso de las molestias, lo mejor es optar por unas lentillas blandas con alto contenido en agua para facilitar la adaptación al ojo. De cualquier modo, deberías ser asesorado por un profesional (oftalmólogo u optometrista) para que haga un análisis exhaustivo de tu ojo y te recomiende las pautas que debes seguir para encontrar la lentilla que mejor se adapte a ti.
En definitiva, todos los tipos de lentes de contacto que existen están dirigidos a una u otra necesidad, y eso es lo que hemos querido mostrarte aquí. Es importante que tengas en cuenta lo que necesitas, pero también cuál es el material de las lentes de contacto más apto para tu ojo. Por ello, en último término te recomendamos acudir a una óptica o bien a un oftalmólogo.